Tiempo en la casa No. 63 • julio-agosto 2020
22 la gotita, de su diámetro y de la viscosidad del aire. Cuando el movimiento es más bien lento, el flujo del aire alrededor de la gotita es muy regular y ordenado; se le llama flujo laminar. En cambio, cuando el movimiento es rápido, el flujo es turbulento y caótico. La forma en que la fuerza de arrastre depende de la velocidad y el diámetro de la gota es distinta para el flujo laminar que para el turbulento. Una clara explicación de estas fuerzas la puede encontrar el lector en el blog del Dr. Drang (Drang, 2014). Figura 6. Flujo laminar en la parte inferior y turbulento en la superior. (G. Settles, 2009) https://commons.wikimedia.org/wiki/File: Laminar-turbulent_transition.jpg 2. Vuelo y destino de las gotitas La partícula comienza su caída urgida por su peso —que es constante— y gana velo- cidad, pero la resistencia del aire aumenta con esta hasta que la resistencia y el peso se igualen: a partir de ahí la fuerza neta es cero, ya no hay aceleración y la partícula sigue con una velocidad constante que se llama velocidad terminal. Este movimiento no suena muy complicado, pero incluye el movimiento del aire alrededor de la gota,
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